La infección por Helicobacter pylori: relato pendiente y pacientes olvidados
La bacteria Helicobacter pylori es una de las
infecciones más comunes a nivel mundial, afectando aproximadamente al 50% de la
población global. Aunque muchas personas pueden convivir con esta bacteria sin
experimentar síntomas, H. pylori es un factor de riesgo importante en el
desarrollo de diversas enfermedades gástricas, como úlceras pépticas, gastritis
crónica y, en casos más graves, cáncer gástrico.
Historia
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Walery Jaworski. Libro de texto sobre enfermedades del estómago. |
Transmisión de Helicobacter pylori y factores de riesgo
La principal vía de transmisión de H. pylori
es el contacto directo con saliva, vómito o heces de una persona infectada. Sin
embargo, la infección también puede adquirirse a través de alimentos y agua
contaminados, especialmente en zonas con condiciones sanitarias deficientes. El
consumo de agua no tratada y alimentos mal cocidos o mal manipulados puede
facilitar la propagación de la bacteria. Esta forma de transmisión es
especialmente prevalente en áreas con acceso limitado a agua potable y control
deficiente de la seguridad alimentaria.
En España, la prevalencia de H. pylori
alcanza cerca del 60% de la población, con una mayor incidencia en personas
mayores, debido a factores históricos y de higiene en su infancia. A nivel
europeo, la prevalencia varía entre el 14% y el 40%, dependiendo del país y del
grupo poblacional estudiado. Globalmente, H. pylori afecta a
aproximadamente la mitad de la población mundial, con una alta incidencia en
países emergentes.
Síntomas y consecuencias
La infección por H. pylori puede ser
asintomática o provocar una serie de síntomas relacionados con la gastritis,
como dolor abdominal, náuseas, hinchazón y malestar general en la zona del
estómago. En algunos casos, puede desencadenar úlceras gástricas o duodenales,
que son lesiones abiertas en la mucosa del estómago o del intestino delgado.
Estas úlceras pueden ser dolorosas y, si no se tratan adecuadamente, pueden
derivar en complicaciones graves, como sangrados o perforaciones en la pared
gástrica. Además, la infección crónica por H. pylori se ha asociado con
un mayor riesgo de cáncer gástrico, una de las formas más mortales de cáncer a
nivel mundial.
Tratamiento de la infección por Helicobacter pylori
El tratamiento más común para erradicar H. pylori
consiste en una terapia combinada con antibióticos y medicamentos que reducen
la producción de ácido gástrico. El régimen estándar incluye dos antibióticos
(como claritromicina y amoxicilina) y un inhibidor de la bomba de protones
(como el omeprazol) para proteger el revestimiento gástrico y aumentar la
efectividad de los antibióticos. Este tratamiento generalmente se sigue durante
7 a 14 días, dependiendo de la recomendación médica y de las características
del paciente.
Uno de los medicamentos más conocidos en el
tratamiento de esta infección es Pylera, que combina tres principios
activos: tetraciclina, bismuto y metronidazol. Pylera tiene la ventaja de ser
una terapia más sencilla, con solo 10 días de tratamiento, lo que facilita la
adherencia de los pacientes. Sin embargo, desde mayo de 2024, España ha
experimentado un grave desabastecimiento de Pylera, lo que ha afectado su
disponibilidad en farmacias. Este medicamento se ha convertido en el fármaco
con mayor desabastecimiento del año, lo que ha obligado a los médicos a
recurrir a alternativas como la pauta OCAM, que es más compleja y puede reducir
la adherencia al tratamiento.
Este desabastecimiento, que se espera se solucione
en diciembre de 2024, ha generado preocupación en el ámbito de la salud
pública, ya que el acceso a tratamientos adecuados es fundamental para la
erradicación de la infección y la prevención de sus complicaciones más graves.
Durante este tiempo, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios
(AEMPS) ha trabajado con la farmacéutica responsable para asegurar que la producción
y distribución de Pylera se normalicen lo antes posible.
Prevención de la infección
La prevención de la infección por H. pylori
pasa principalmente por mejorar las condiciones sanitarias, especialmente el
acceso a agua potable de calidad y la seguridad alimentaria. Evitar el consumo
de alimentos crudos o mal cocidos, así como asegurar una correcta higiene de
manos, son medidas fundamentales para reducir el riesgo de contagio.
Aunque la erradicación completa de H. pylori
sigue siendo un desafío, las mejoras en las condiciones de vida y el acceso a
tratamientos adecuados han ayudado a reducir la carga de esta infección en
muchas regiones del mundo. En países desarrollados, la prevalencia de la
infección ha disminuido en las últimas décadas, pero sigue siendo un problema
de salud importante en diversas zonas de Asia, África y América Latina.
Al incorporarlo al tema de este mes —aquellos
relatos y realidades que han sido postergados— recupero una voz que merece ser
escuchada: la de las personas que padecen una infección silenciosa que parece
que puede aumentar el riesgo de cáncer gástrico si no se trata. Además, el
médico polaco Walery Jaworski, quien fue el primero en observar las bacterias gástricas
y asociarlas con enfermedades digestivas, también fue un gran olvidado ya que
su trabajo pasó casi desapercibido: publicado solo en polaco y en un manual de
digestivo, no trascendió el ámbito local y quedó relegado al olvido. No recibió
ni el Nobel ni reconocimiento alguno, pese a ser el precursor de la observación
moderna de lo que hoy conocemos como H. pylori. Este texto no solo une
un borrador antiguo con un enfoque renovado, sino que también rinde homenaje a todos
esos pacientes y voces anónimas que merecen visibilidad, atención y, sobre
todo, que no queden olvidados.
Lecturas interesantes
- World Gastroenterology Organisation. (2021). Helicobacter pylori en los países en desarrollo. https://www.worldgastroenterology.org/guidelines/helicobacter-pylori/helicobacter-pylori-spanish
- Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios. (2025). Medicamentos con problemas de suministro. https://cima.aemps.es/cima/publico/detalle.html?nregistro=75095
- El País. (2024, noviembre). Uno de los tratamientos contra la Helicobacter, una frecuente infección gástrica, se convierte en el fármaco con mayor desabastecimiento. https://elpais.com/sociedad/2024-11-23/uno-de-los-tratamientos-contra-la-helicobacter-una-frecuente-infeccion-gastrica-se-convierte-en-el-farmaco-con-mayor-desabastecimiento.html
Un post muy interesante y recomendable. Tuve la bacteria, llevé el tratamiento durante meses, volvió a reaparecer y tras el segundo tratamiento logré erradicarla. Sus síntomas pueden confundir y como bien mencionas es muy importante la salud gástrica.
ResponderEliminarUn placer pasar a leerte. Saludos